Simple elección

Es la sobremesa. Estoy con los más jóvenes. Elijo hablarles sobre el poder del lenguaje. ¿Cómo afecta a nuestras acciones?, ¿cómo a lo que logramos en la vida?

¿Será demasiado trascendente para esta hora? Quiero empezar, pero me falta seguridad. No estoy acostumbrado a tan joven audiencia. Me lanzo:

– Para mí, el mayor grado de compromiso, mi más potente motor, es la elección. La que me aporta la energía del momentum.

Silencio… uno, dos, tres, … Miro a los muchachos. ¡Ojipláticos se han quedado! Patidifusos.  ¿Cómo es que se han quedado mudos?, ¿entenderán el significado de momentum? ¡Ah!, de inmediato, caigo…

– ¡Un momento! He dicho elección.
– Ah, elección -repiten.

Risas, carcajadas; se relajan otra vez. Sin quererlo, he captado su atención como no lo hubiera hecho de ninguna otra manera… Puedo continuar.

¿Cómo mantener el momentum?, ¿cómo mantener la acción?, ¿cómo vencer el cansancio y el desaliento? 

No hace falta mucha disertación. Simple elección: mantener el momentum porque sí. Porque así lo he elegido. Elección de seguir, de perseverar. Un propósito. Previamente elegido.

De continuo me llegan ofertas de todo tipo… No todas saludables. No todas honestas. No todas decentes. ¿Verdad que a ti también? Elijo rechazarlas. ¿Y tú? Rechazo las tentaciones embaucadoras. Me resulta fácil. Es mi elección. Elijo fidelidad. Sí, a mi pareja. En el matrimonio. Elijo lealtad. A mi proyecto de vida. A mis convicciones. Elijo honestidad. Elijo valores.

¿Cuesta? No tanto. Es lo que he elegido. Libremente. Cada vez que me reafirmo en la elección, rechazando la tentación, salgo más fuerte. Lo tengo claro: me compensa.

Elijo y cumplo. Tengo un propósito superior. Un ideal. Ambiciono carismas mejores. También en lo pequeño. Porque lo que haces en lo pequeño, sueles hacerlo en lo grande.

No es que quiera… No es que tenga que… No es que deba… Es que lo elijo. En la elección está mi fortaleza. La elección es el capitán general de mi voluntad. La más alta en el escalafón. Lo elijo. Y punto. Se acabó. No hay más opción. 

Camino tranquilo por la senda de la vida. Por anticipado, ya elegí.

¡Por una vida apasionante! 
vive, disfruta, comparte
Por el mismo autor: www.15habitos.com