Este es el ayuno que yo quiero: soltar las cadenas injustas, desatar las correas del yugo, liberar a los oprimidos, (…) partir tu pan con el hambriento, hospedar a los pobres sin techo, cubrir a quien va desnudo y no desentenderte de los tuyos.
Entonces surgirá tu luz como la aurora, enseguida se curarán tus heridas, ante ti marchará la justicia, detrás de ti la gloria del Señor.
(…) Cuando alejes de ti la opresión, el dedo acusador y la calumnia, cuando ofrezcas al hambriento de lo tuyo y sacies al alma afligida, brillará tu luz en las tinieblas, tu oscuridad como el mediodía. El Señor te guiará siempre (…), dará vigor a tus huesos. (…) Serás un manantial de aguas que no engañan.
Isaías 58: 6-11
¡Por una vida apasionante!
vive, disfruta, comparte
Por el mismo autor: www.15habitos.com